El campo de concentración de Terezin, República Checa
A tan solo 60 km de la preciosa ciudad de Praga se encuentra Terezin, campo de clasificación n4zi donde mataron a más de 10.000 judíos. Se supone que desde allí los mandaban a Auschwitz o a Mathausen, aunque acabó siendo campo de exterminio también.
El bus te deja a 2km de allí, en el pueblo, que al principio fue concebido como guetto. Antes de entrar al campo, atraviesas el cementerio donde están enterrados todas las personas que fueron asesinadas allí, en una digna sepultura.
Os pongo en situación: Llegamos a la puerta (2 personas) un guarda nos da dos folletos completísimos en español y nos dice que cierran a las 18h. No había nadie más en el campo. Nadie. Estábamos completamente solos. Durante horas y horas. Ni un ruido. Silencio. Solo silencio.
Nada más pasar la puerta, a la derecha, encontramos los pabellones de mujeres que han sido reformados a baños una parte y como museo otra. El resto del campo está intacto.
Primero pasaban por la zona de clasificación. Después, en la «Kammer» les daban la ropa; les proporcionaban el típico uniforme azul a rayas que conocemos, o bien ropa de ejércitos derrotados, para mayor humillación.
Y llegamos a la entrada de la zona de barracones. El escalofriante mensaje que preside estos lugares, también estaba allí. Impresiona verlo escrito en el sitio por primera vez.
Estos estaban dentro, al lado del paredón de fusilamiento. Dicen que en Terezin nunca se oyó un pájaro cantar ni una mariposa volar. Me lo creo. Nunca la tristeza va a desaparecer de allí.
El túnel de la muerte, de vuelta. A la izquierda quedan los pabellones de los nazis donde vivían con sus familias. Y no les faltaba de nada, claro.
Detrás de los barracones de los guardias, tuvieron que ampliar una zona nueva. Aquí los barracones albergaban hasta 600 personas en ellos. ¿A que ahora la primera zona os parece un resort de lujo?
Aquí hubo un intento de fuga de 3 presos; como represalia, en el patio, mataron a uno de los que se intentó fugar y a un hombre y una mujer al azar para advertir al resto. A los otros dos que se intentaron fugar, los apalearon hasta la muerte delante de todos.
En esta zona hubo españoles. Sólo un hombre que vivió hasta los años 80 logró escapar de aqui. Estas eran las celdas de castigo.
Después de pasar muchas horas allí dentro recorriéndolo todo, esta estatua te despide, recordándote que aunque hayas visitado el campo vacío, ese terrible sitio estaba lleno de seres humanos que fueron injustamente asesinados por otros también considerados seres humanos. Nunca lo olvidemos.