El cementerio de Paredes de Buitrago se encuentra anexo a la ermita de la Soledad, erigida en el siglo XVI, por lo que ha funcionado como lugar de enterramiento desde hace siglos. Rodeado de un muro de piedra, el cementerio de Paredes de buitrago dispone de dos entradas, una a través de la zona del sanatorio, más nueva, y la principal, enfrentada a esta última, que conserva la forma y disposición de los cementerios (o camposantos en ese caso) del siglo XIX. 

Encontramos dos zonas claramente diferenciadas, la más antigua donde aún se conservan sepulturas de la primera mitad del siglo XX y otra más nueva y remodelada, formando parte también de l ampliación del cementerio, donde las sepulturas ya pertenecen a las calidades y formas más usuales del siglo XX y XXI. El cementerio fue completamente reformado y no quedan vestigios de las sepulturas más antiguas que un día lo decoraron.