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El cementerio de Navas del Rey se encuentra en las afueras de la población, en una zona histórica ya que allí hubo un castillo y alrededor se conservan las zonas de dehesa para las cacerías reales. 

El cementerio fue construido en el siglo XIX y su ampliación data de 1939. Está delimitado por un muro de mampostería de media altura, nos deja ver el interior, que ha sido remodelado a lo largo del tiempo. La puerta, de verja abierta, nos deja ver el interior. 

Una vez dentro nos encontramos un cementerio bien cuidado, con el suelo solado en su parte más nueva, y con poquísima vegetación. Diferenciamos claramente la zona antigua de la nueva; la primera está adosada a la capilla y en ella el suelo es agreste y se conservan las lápidas de entonces, cosa que históricamente agradecemos. A la izquierda podemos ver la ampliación, mucho más cuadriculada, con todas las sepulturas en granito pulido y sin ningún tipo de arte funerario destacable.