El cementerio de Aoslos fue creado después de la Guerra Civil ya que antes se enteraba en Horcajo de la Sierra. Las sepulturas más antiguas pertenecen a la década de los años 70del siglo pasado. El cementerio continúa un orden desde su inauguración y las sepulturas se van vaciando cada 20 años, por lo que este cementerio es infinito. 

La entrada llama la atención porque parece el acceso a un establo, la puerta es muy original. A la izquierda encontramos la ampliación, compuesta por un pequeño cuartel de seis nichos de los cuales solo hay tres ocupados, y el resto del terreno está libre. En la zona de la derecha nos encontramos el cementerio original, con sepulturas al suelo, que conserva el paso del tiempo en ellas: podemos encontrar desde las tumbas más antiguas del principios del siglo XX hasta los últimos enterramientos, por lo que la evolución de los diferentes tipos de sepultura y sus modas quedan bien reflejadas en este pequeño cementerio rural.