El cementerio municipal de Tacoronte, llamado de Santa Catalina, se encuentra integrado en la población, formando parte de su casco urbano. Está situado enfrente de la iglesia del mismo nombre.

De planta cuadrada, está delimitado por un muro de piedra encalado de media altura. Una vez dentro, está dividido en cuatro cuadrantes, dos de ellos dedicados principalmente a las sepulturas a tierra, y el resto a cuarteles de nichos. Característica es la tierra que cubre las zonas, una gravilla marrón que recuerda a la tierra volcánica que abunda en toda la isla.

Lleno de parterres con sus arbustos de decoración, y árboles de gran tamaño y que producen una agradable sombra, este cementerio casi podría ser un pequeño jardín más que un camposanto. Incluso tiene una fuente de tres pisos, coronada por un ángel de piedra que ayuda a darle ese aspecto.

Tiene pocos panteones familiares, suponemos que debido a la falta de espacio. De destacar es uno hecho a base de cantos rodados perfectos, una original tumba, sin duda.

Este cementerio además guarda un cuadrante para los enterramientos no católicos, donde podemos encontrar tumbas de diferente nacionalidades, en especial alemana.

Como en todos los cementerio de esta isla, las vistas hacia el mar son privilegiadas, convirtiendo a estos cementerios tinerfeños en unos recintos de paz y tranquilidad llenos de luminosidad que invitan a dar un paseo entre sus tumbas. Son de visita obligada.

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Cementerio municipal de Tacoronte