Cementerio municipal de Inca

El cementerio municipal  de Inca fue establecido en 1820 como consecuencia de la orden de Carlos III y su cédula real, donde establece los enterramientos fuera de extramuros para que no perjudique la salud pública de los habitantes de la población.

De gran solar irregular debido a las ampliaciones acometidas en él, esta necrópolis del municipio de Inca se encuentra cercado en todo su perímetro por un muro realizado en mortero y con un tono terroso. Sus entradas se disponen repartidas entre todo su contorno debido a la extensión del recinto y para facilitar el acceso a los visitantes que quieran. Anexo al cementerio se encuentra el tanatorio de la localidad donde recientemente han incluido el servicio de cremación.

Dentro del cementerio municipal de Inca veremos cómo se encuentra distribuido en patios los cuales cuentan con un estilo arquitectónico singular, se combina perfectamente las agrupaciones de nichos de líneas curvas con la vegetación, formando pequeños espacios para el recogimiento y poder descansar un poco. Su vegetación es diversa y variada, teniendo en cuenta el estilo mediterráneo de la isla así pues entre las palmeras y otras especies autóctonas de la zona se encuentran los siempre presentes cipreses.

En cuanto a las costumbres funerarias cabe decir que una amplia mayoría de los enterramientos de este cementerio se disponen en forma de nichos, las inhumaciones en tierra podremos verlas en mayor número en su zona más antigua por ser la norma de enterramiento en tiempo atrás.

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