El cementerio de Sumarcárcer se encuentra en un emplazamiento geográfico privilegiado, ya que se encuentra a los pies de la montaña que corona el castillo de Peñaroya.

De planta rectangular, está delimitado por un muro encalado en blanco, con una puerta principal en forma de arco a través de la cual se accede al cementerio. Fue construido en 1128 por orden del párroco Alejo Sendra para subsanar los problemas de salubridad que provocaba el antiguo cementerio. Las tierras fueron donadas por el Conde de Orgaz a la iglesia para tal fin. En 1921 se colocó la primera piedra y en 1922 se realizó la primera inhumación en este camposanto.

A través de una avenida principal que desemboca en la capilla, podemos encontrar principalmente cuarteles de nichos, pero al ser un cementerio construido en pleno modernismo, encontramos en sus panteones varios rasgos de esta corriente arquitectónica, como pueden ser las cúpulas que rematan los torreones y el uso de las tejas y cerámicas de diferentes colores.

Este cementerio de Sumarcàrcer ha sido escogido por el jurado del concurso de cementerios de la Revista Adiós como el mejor cementerio de España 2017, debido a su enclave, en la ladera de una montaña que le da más aspecto de fortaleza que de necrópolis, además de su construcción en tres alturas, poco habituales en este tipo de lugares, para poder salvar las irregularidades del terreno, por lo que dota a este cementerio de Sumarcàrcer a su vez de unas vistas maravillosas sobre la montaña y el río Júcar.

Contacta con nosotras