Cementerio de Deifontes

Bastante próximo a su población y algo escondido por una agrupación de árboles encontraremos el cementerio de Deifontes, de solar rectangular seguramente ha sufrido alguna ampliación a lo largo de los años.

Su perímetro se encuentra cercado por un muro enfoscado y enjalbegado, para acceder a su entrada principal primero tendremos que subir por una pequeña rampa que facilita el acceso aquellas personas con movilidad reducida.

Para entrar al interior del recinto debemos traspasar una puerta de forja con celosía, se encuentra ubicada bajo arco de media punta y sobre ésta una gran cruz de piedra nos indica ante que edificación nos encontramos.

Una vez dentro observamos que desde la misma entrada comienzan a ubicarse las inhumaciones en tierra, dispuestas de manera ordenada en ellas veremos distintos tipos de ornamentación funeraria; cruces de forja, alabastro, vallas que rodean la sepultura y por supuesto símbolos religiosos.

Una gran agrupación de árboles divide el cementerio en dos, pasados éstos se encuentran las agrupaciones de nichos, forma de enterramiento más demanda en los últimos años, sus elementos de adorno son lápidas sencillas sobre la que se dispone el nombre del difunto así como pequeños arreglos florales.

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