Cementerio de Alcúdia
Información
Dirección: Camí de l´Albufera, 2.
Horario: Sin horario establecido.
Tfno (ayuntamiento): 971 548 071.
Coordenadas Google Maps: 39.847561, 3.12223
Enlaces de interés
Cementerio de Alcúdia
El cementerio de Alcúdia cuenta con un gran solar de forma irregular, todo su perímetro se encuentra cercado por una tapia realizada en mampostería rematada en corona de tejas, de la fachada principal sobresale lo que es el acceso al camposanto. Tras pasar un gran arco entraremos en una pequeña entrada a través de las cuales se accede a las dependencias propias del recinto.
A día de hoy el cementerio de Alcúdia se halla dividido en dos zonas, por una parte el cementerio católico en el cual podremos observar distintos tipos de tradiciones en el arte funerario así como algunos panteones de estilo neogótico. La otra parte se la conoce como cementerio civil o protestante, ambas zonas están separadas entre sí, de forma que el camposanto protestante se encuentra adherido a uno de los muros del cementerio católico.
De hecho, la puerta de este pequeño cementerio se encuentra generalmente cerrada, por lo que si quiere ser visitado tiene que pedir permiso, allí en encuentran una veintena de sepulcros que por razones religiosas, en aquellos tiempos debían ser inhumados alejadas de las almas católicas.
Personas ilustres
En el cementerio destaca del resto una sepultura en la que se puede leer el nombre de Kenneth Cromar Tilman, cuya muerte acaeció en 1924. Durante mucho tiempo ha pasado completamente desapercibida, no dejaba de ser un palo de madera con una placa en la que junto al nombre había un dato Flight Lieutenant (teniente aviador). Se ha podido saber más detalles de esta sepultura gracias a que unas pocas personas indagaron en el pasado, para saber más tendremos que remontarnos a la época de la I Guerra Mundial, cuando la presencia de escuadras navales británicas en la bahías de Polleça y Alcúdia eran notables.
Dichas escuadras se dirigían a la costa de la isla con el fin de realizar prácticas navales y mejorar su estrategia militar, en una de ellas se encontraba el teniente Cromar que realizaba ejercicios de prácticas a bordo del portaviones HMS Argus.
El fatídico día el teniente a bordo de una avioneta modelo Parnall Panther cayó al agua nada más despegar seguramente a causa de una fallo humano, junto al teniente se encontraba en ese momento un militar que hacia las funciones de piloto de la nave. El hecho de que el accidente ocurriera justo delante de la flota facilitó las tareas de rescate, salvando la vida del piloto pero no así del teniente Cromar que probablemente murió ahogado. Por las dificultades de la época para realizar una repatriación el teniente fue enterrado en Alcúdia, en la parte del cementerio protestante y como homenaje se colocó en su sepultura una parte de la hélice del avión siniestrado que pudo recuperarse del mar.
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